lunes, 20 de julio de 2009

El deseo

Construyo un mundo alrededor de mis propios deseos; en donde te encuentro una noche de agosto en una avenida desierta o en un parque oscuro y me abrazás sin decir nada. Creo con mi mente pinceladas rojas, risas y caudales color carmín que producen sentimientos. Y también invento un corazón que late cuando me miras a los ojos o cuando me estrechas fuerte contra tu pecho. Construyo y me destruyo. Ilusión y realidad que se contradicen.

1 comentario:

  1. Construir ese musculo atento y esencial. Cuatro golpecitos, oxigenaciòn, si, era màs realidad que ilusiòn.

    Saluditos.

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